La sarna ha regresado al Reino Unido, con un aumento de casos en todo el país informados por médicos preocupados por una peligrosa escasez de tratamientos. Esta situación de “pesadilla” representa una “grave amenaza para la salud pública”, afirmó la Asociación Británica de Dermatólogos en el periódico The Guardian. En particular, el norte de Inglaterra registró en noviembre el doble de casos normales. La sarna es una afección altamente contagiosa causada por ácaros, que provoca un sarpullido que pica. La enfermedad se transmite por contacto cercano con la piel y cualquier persona puede infectarse con la enfermedad y debe recibir tratamiento rápidamente para evitar que se propague. Pero encontrar tratamientos en el Reino Unido se ha vuelto difícil.
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Los problemas de la cadena de suministro, la guerra en Ucrania y el alto costo de las materias primas provocaron escasez tanto de permetrina como de malatión durante varios meses. Los médicos dicen que la incapacidad de tratar a las personas infectadas conduce rápidamente a la propagación de la sarna. Para los dermatólogos que hablaron con The Guardian, la situación se ha convertido en “una pesadilla absoluta”, con brotes en residencias de ancianos y alojamientos universitarios. Desesperados, muchos pacientes intentaron comprar costosos tratamientos alternativos en sitios web fuera del Reino Unido. Un estudio de la Asociación Británica de Dermatólogos encargado por The Guardian encontró que ocho de cada nueve representantes regionales informaron de un aumento de los casos de sarna en su zona este año. Siete de nueve tenían deficiencia de permetrina y malatión.
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